jueves, 16 de abril de 2009

Why bother? ¿Por qué molestarse?

Cultivar en la ciudad aunque sea una pequeña parte de nuestros propios alimentos es, como lo planteara Wendell Berry hace treinta años, una de esas soluciones que impulsa de hecho más soluciones en vez de provocar más problemas (como inevitablemente provocan las “soluciones” del etanol o la energía nuclear). No es sólo ahorro de carbono: cultivar aunque sea un tanto de nuestra comida impulsa muchos y valiosos hábitos. Podemos dejar de depender de los especialistas en el cuidado de nosotros mismos. Podemos descubrir que nuestro cuerpo sigue siendo útil para algo y que ese algo es nuestro propio sustento. Si los expertos están en lo correcto, si el petróleo y el tiempo se agotan, muy pronto van a ser cruciales estas habilidades y hábitos. Y es muy probable que nos urjan alimentos. ¿Pueden proporcionarlos las huertas? Bueno, durante la Segunda Guerra Mundial las huertas familiares (llamadas de la “victoria”, porque parecían cruciales para obtenerla) proporcionaron tanto como el 40% de los vegetales que comían los estadounidenses. Además, empezaríamos a restañar la grieta entre lo que pensamos y lo que hacemos; retejer en una sola identidad nuestras facetas de consumidores, productores y ciudadanos. Es probable que eso nos lleve a emprender nuevas relaciones con los vecinos, porque la idea es producir, regalar, intercambiar, prestar herramientas o pedirlas prestado … Grandes cosas ocurren cuando uno cultiva su propia huerta, algunas relacionadas con el cambio climático, otras indirectas. Se nos olvida que cultivar nuestra comida obedece a la tecnología solar original: mediante la fotosíntesis se producen calorías. Hace algunos años la mentalidad de la “energía barata” descubrió que podía producirse “más comida con menos esfuerzo” reemplazando la luz del sol con fertilizantes y plaguicidas basados en combustibles fósiles, y el resultado fue que la típica caloría de energía alimenticia requiere unas 10 calorías de energía fósil. El modo que tenemos de alimentarnos, o más bien, la manera en que dejamos que nos alimenten otros, es responsable de por lo menos una quinta parte de los gases con efecto de invernadero.
Michael Pollan, traducción de un extracto de “Why bother?” ( The New York Times, 20 de abril de 2008) publicado en la revista Biodiversidad.
Unas lechugas en una maceta, una pequeña tomatera, todo vale. Así que, manos a la obra.....
Una de las tareas que estamos llevando a cabo últimamente es el acolchado de las fresas. El acolchado es una técnica que consiste en cubrir el terreno con paja seca alrededor de las plantas. En las plantas con frutos que tocan el suelo, es muy conveniente porque evita que las frutas se pudran antes de ser recogidas. Además, mantiene la humedad del terreno y evita, de manera natural, que crezcan malas hierbas. En algunos casos, sin embargo, puede ser contraproducente. Por ejemplo, en zonas donde los calabacines tienden a sufrir el oidio (en nuestro huerto, por ejemplo) es mejor no acolchar el terreno donde estén estos para que esté más ventilado y evitar la propagación del hongo.

Este último fin de semana pudimos comprobar la efectividad del acolchado. A pesar de que continúan las lluvias, las fresas no se pudrieron y pudimos recoger una mini-cosecha, de la que dimos buena cuenta allí mismo.
Los guisantes ya están brotando.

Y los calabacines han agarrado.
En el semillero tenemos las calabazas y los tomates, esperando a que la lluvia nos de una tregua y podamos plantarlos. Si seguimos así, vamos a tener que ponerlos en maceta. A ver si se cumple el refranero, como me recordó mi madre, "marzo ventoso y abril lluvioso hacen un mayo florido y hermoso", y podemos disfrutar de nuestras lechugas el mes que viene.


15 comentarios:

  1. Hola Iciar!! El huerto está precioso, me imagino el sabor de esas fresitas cultivadas con todo el cariño del mundo, los raviolis, espectaculares, ya te he cogido la idea del relleno, solo falta que nos compremos el moldecito y nos pongamos a ello, pronto caerá, te lo aseguro.

    Besos...

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  2. Pues siento decirte que Marzo no tuvo nada de ventoso. Este año hay que aplicar lo de "cuando Marzo mayea, Mayo marcea". Aquí está todo florecido desde hace un mes y hoy nevó, granizó... En fin, paciencia.

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  3. Hola Ajojnjolí, cuánta razón tienes en cultivar tu propia huerta, acá que sobran extensiones de terreno y la gente está gorda y mal nutrida.
    Preciosas las frutillas , qué sana envidia, lo intentaré esta primavera, sin dudas.....tengo un mini huerto, con aromáticas y algunas que otras cosas, tomates negros, ajíes, etc.
    Buena cosecha !
    Besos

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  4. Estupenda huerta. Yo planté fresas en una maceta en el balcón hace dos años y como dieron tan buen resultado y aguantan tan bien el frío en invierno, este año he plantado muchas más. La verdad es que tengo ganas de informarme a ver qué más cosas puedo poner en mi modesto balcón y teniendo en cuenta esta climatología del norte (que por cierto, llevamos un mes en manga corta).
    Un abrazo y espero que nos sigas informando sobre los progresos del huerto :-D

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  5. A mis abuelos les emocionarian estos post.
    Un beso grande hortelanos

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  6. Precioso post. Estamos con obras, en un mes y medio aproximadamente nos mudamos y la terraza del nuevo piso es bastante grandecita. Quiero plantar, cunque sólo sea una tomatera y un par de lechugas. Se que tengo que informarme porque estoy pez en todos estos temas pero lo importante es la ilusión, no?
    Te iré contando mis avances.
    Un abrazo!

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  7. Qué bonito!!!, no sabes como te entiendo!!! que bonitas fresas, es algo que en nuestra huerta no termina de germinar. Pero tenemos otras frutas y hortalizas que bien saben cuando se cogen directamente de la tierra a la mesa.
    Besos

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  8. Yo pienso que todas estas cosas, los huertitos, la cocina, tiene que ver con nuestro estado de ánimo, de felicidad, de vida....un lapsus mío, pero en fin, la pura verdad que un cultivo propio, aunque sea en una maceta es una felicidad. Yo tengo los calabacines semillando y otros grandecitos para el trasplante, pero creo que en unos dias mas ya se pueden poner en la maceta. Estoy chocha!!!!!

    Gracias por tu entrada, es fantástico saber mas cosas para plantar y ademas de disfrutar de tus plantas ya dando frutos.
    Super lindo.

    Besos!

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  9. "Il faut cultiver notre jardin".
    Nunca pierdo de vista la lección de "Candide". GRACIAS, un beso, feliz fin de semana.

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  10. Precioso el huerto!!!!Estupenda la mini-cosecha de fresas (y veo que hay unas cuantas que en tres o cuatro días ya estarán), espero que tengais una gran cosecha de lechugas, calabacines y guisantes. Besotes!!!

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  11. Ajonjolí,
    Me encanta que compartas tu huerta, no sabes cuánto me motiva verte disfrutar con ella. ¡Cómo va dando sus frutos! Las fresas se ven preciosas.
    Un beso

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  12. Que lindo post, y que bonita huerta!
    Por cierto, el pan turco del post anterior delicioso!
    Un abrazo!

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  13. Que grande eres, amiga! Estamos emocionados, tu post és una delicia! Un beso fuerte y a disfrutar de los frutos que nos da madre tierra.

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  14. Hola Ana! con eso de que te has cambiado el nombre de usuario no te reconocía! gracias por tus palabras, y estoy deseando ver tus ravioli.

    Cíes, encantada de conocerte :) Aquí Marzo no mayeó nada de nada...así que espero que mayo sea bueno......


    Ciber, eso es una pena, que haya terreno y la gente pase hambre....una buena reforma agraria haría falta!!! Las fresas son de las plantas que aguantan todo, no hay casi que cuidarlas. Eso sí, las tienes que plantar antes del invierno (en tu caso antes del verano) para que pasen frío, porque si no no dan fruta. Nosotros hemos plantado tomates negros de Lanzarote, estoy deseando ver cómo son....

    Noema, gracias, hay alguna foto de tus fresas en tu blog? voy a mirar.... En tu balcón seguro que puedes poner un montón de cosas, tengo un amigo en holanda que planta lechugas, tomates... Seguro que os informaré de nuestros progresos, si se me cae la baba con mi huertita....

    Muchas gracias Su, pero a ver si conseguimos que lo de los huertos no sea cosas de abuelos! ;)

    Marta, desde luego que lo importante es la ilusión. Yo no sabía nada de nada de plantas hasta hace unos meses, y ya me ves. En una terraza puedes poner también calabacines, berenjenas, espinacas.....ya verás, esto engancha. Estoy deseando que me cuentes tus avances :)

    Mari, ¿donde tienes tu huerta? si es en un sitio demasiado húmedo quizá sea por eso...

    Kako, desde luego, de acuerdo 100%, yo si estoy depre sólo tengo que pasar un rato por el huerto y relativizo todo! Espero que pongas fotos de tus calabacines en el blog ;)


    Canny, como ya te he dicho, pedazo de referencia literaria. Bien sur qu'il faut.

    Salvia, ¡gracias! La última mini cosecha ya no ha sido tan mini, ¡1 kg! Y las lechugas, en una semanita ya habrá alguna...

    Sol, y a mi me encanta compartirla con vosotros, es la niña de mis ojos, la huertita :)

    Illetapitita, ¡muchas gracias!

    Cuina vermella, muchísimas gracias, en eso estamos, cuidando la tierra y agradeciéndole lo que nos da ;)


    ¡besos!

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  15. Nosotros sembramos fresas pero no nos fueron bien, posiblemente fue por no hacerlo a tu manera, lo volveremos a probar a ver que tal. verdad que uno disfruta de comer lo que ha sembrado? ayer cenamos de unas alcachofas a la plancha y hoy cenamos de habas de nuestro huerto; todo tiene otro sabor... saludos.

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