Hoy voy a ser un pelín ordinaria, pero qué jodido es hacerse mayor. Lo jodido no es que tú te hagas mayor, lo jodido es que los que te rodean también se hacen mayores. Y empieza a haber huecos en las filas. Huecos siempre importantes. Huecos anunciados y huecos inesperados. Y huecos que se solapan con otros huecos, cuando aún estás tratando de acostumbrarte, si es que eso es posible, al anterior. Thomas era demasiado joven, aunque se había bebido la vida a grandes sorbos. Había vivido tanto y tan rápido que siempre tenía historias que contar. Y hablaba mucho, a veces demasiado, pero hasta eso lo echaremos de menos. Y cocinaba como los ángeles.
Ahora P., entre otras cosas, tiene que ocuparse de la cocina. Y dice que la mayor parte de mis recetas le parecen demasiado laboriosas, con ingredientes demasiado exóticos. Bueno, pues aquí va una fácil, rápida, y con ingredientes que se pueden encontrar en cualquier super canario. Se prepara en media hora. Y es muy reconfortante. Para el estómago y el alma.
Para P. Con mucho, mucho cariño. Si os mudaseis a la isla de al lado tu hermanita se ocuparía de la cocina.
Ingredientes, para 4 personas
2 berenjenas
200 gr de lentejas cocidas
3 zanahorias cortadas en cubitos
1/2 pimiento verde troceado
1/2 pimiento verde troceado
1 hoja de laurel
1 cebolla picada
1 cucharadita de tomillo
2 cucharadas de cilantro fresco picado
2 cucharadas de yogurt natural
aceite de oliva, sal y pimienta
Primero asamos las berenjenas. Para sacarle todo su sabor las asamos bajo el grill. Se ponen en una bandeja de horno, se enciende el grill, y se pone la bandeja cerca del grill, para que las berenjenas se "quemen". Yo las dejo 30 minutos, dándoles la vuelta a los 15 minutos. Es conveniente vigilar y sacarlas cuando empiecen a estar negras. Un vez que las berenjenas se hayan enfriado les quitamos la piel, que sale muy fácilmente, y la carne de las berenjenas la ponemosa escurrir y luego la trituramos y salpimentamos.
Calentamos aceite en una sartén y rehogamos las zanahorias, la cebolla y el pimiento. Cuando estén tiernos, añadimos la hoja de laurel, el tomillo y las lentejas. Cuando se hayan mezclado bien los sabores, servimos en platos con el cilantro picado por encima, unas cucharadas del puré de berenjenas y una cucharada de yogurt natural por encima.
Esta receta está inspirada en una del libro Plenty, de Yotam Ottolenghi.
Ajonjoli, lo siento muchisimo!!!
ResponderEliminarUn beso enorme
PD-> Me encanta tu receta... me encantan las lentejas y la berenjena!!! ^__^
Lo siento... sí, es así. Te sientes como en un bombardeo. Besos.
ResponderEliminarEsos huecos suelen ser muy dolorosos... entiendo como te puedes sentir
ResponderEliminarBesos. Recetasdemama
Ajónjoli, pienso lo mismo que tu, mi marido acaba de perder hace 3 meses a su padre y encima su madre "ha empezado a perder" sus recuerdos y está bastante mal. Creíamos que ibamos a ser niños siempre, y no es así, la vida pasa y hay que disfrutarla.....pero tienes mucha razón...."es jodido hacerse mayor"....me llevo un platito a ver si me reconforta el alma....Un besazo y ánimo
ResponderEliminarHola Ajónjoli
ResponderEliminarAsí es, la vida pasa volando y no nos damos cuenta que nos hacemos mayores... muchas veces vivimos en el futuro... y el presente esperemos que pase... de los huecos te entiendo perfectamente, cuando vine a España tenia abuelos, a mi tía... ahora cuando voy a mi país, falta mucha gente y ni me di cuenta que se han ido.
Así que me llevo este plato, a ver si reconforta un poco mi alma.
Un besito.
Vaya, Ajonjolí. Siento mucho que no lo estés pasando muy bien últimamente. El tiempo desafortunadamente pasa demasiado deprisa...
ResponderEliminarCambiando de tercio: estas lentejas tienen muy buena pinta. Y lo de la mezcla con la berenjena me parece muy buena idea!
pues sí, lo has definido de maravilla con las filas, lo siento mucho. Pero, seguro que con tus lentejitas todo sabrá mejor
ResponderEliminarNo sé qué decir...Lo siento mucho.
ResponderEliminarUn besazo.
Sí que son duros estos embates de la vida. Te dejo un abrazo para acompañar el cariño con que has cocinado estas lentejas.
ResponderEliminarMucho ánimo para todos.
Ajonjolí, mi niña, se me ilumina la cara cuando me llega una entrada nueva tuya a la bandeja del correo. Siempre sé que me va a gustar y que estará llena de color, aroma y sabor... Dile a P. que todos le ayudaremos a cocinar cosas ricas y sanas y que seguro que más d euna vez le sacaremos una sonrisa... a que sí?.
ResponderEliminarUn besote preciosa... siempre es un placer leerte.
Que mal lo has pasado ultimamente, te mando un abrazo y la receta me sonaba a Ottolenghi, pero las lentejas y yo casi no nos hablamos.
ResponderEliminarBesos
mi madre le hecha berenjena a los garbanzos pero con las lentejas nunca hemos probado... gracias por la idea
ResponderEliminarUn fuerte abrazo cielo.
ResponderEliminarHola guapa...si si la vida es durilla, haces bien de preparar un plato taaan reconfortante...algo ayuda verdad???
ResponderEliminarun abrazo muy fuerte
Lo siento.
ResponderEliminarEspero que este platillo le reconforte el alma.
Besos
Vaya, parece que llueve sobre mojado, y además supongo que llegan los recuerdos.
ResponderEliminarA mi hoy te parecerá raro pero me animas, tengo rachas tristes, y al leerte pienso en la suerte que tengo, estoy aquí, y por malos días que llegen, estoy yo y están casi todos los que más quiero.
Gracias,
Son duros momentos, que aunque parezca mentira el tiempo te ayudará a suavizarlos , piensa que te estará viendo y quiere verte feliz.
ResponderEliminarBesitossss
Hacer cosas para los demas reconforta y ayuda a llenar el hueco que dejan los que se van ;-)
ResponderEliminarA mi tambien me reconfortaria ese peazooo de plato de lentejas, que no es para nada comida de viejas !!
Un besazo
Lo siento mucho Ajonjoli. La verdad ante estas cosas siempre me siento muy estúpida porque nunca sé que decir. El paso del tiempo cuando te pones a valorar los que ya no están, se hace durito, y mira que sé de lo que hablo. En la familia llevamos una racha muy mala, de momento no falta nadie, pero están enfermitos.
ResponderEliminarPienso como Carmen que te dice que ayudar a los demás reconforta, eso hace que aproveches más tiempo con los que queden.
Quería mandarte muchos ánimos y un abrazo muy fuerte desde Barcelona.
P.D. Está de más comentarlo, pero la receta de 10.
hola chicas, muchas gracias por vuestros ánimos, la verdad es que no quiero que este blog se convierta en un panteón pero.... qué puedo hacer, han venido así las cosas, dos de golpe, como bien ha descrito miriam, te sientes bajo un bombardeo, sí, y no podía dejar de hacerle un pequeño homenaje a mi cuñadín, más bien mi cuñadote, porque era como un oso de grande!
ResponderEliminarPero no preocuparse que pienso seguir con el buen rollo y el espíritu alegre, que además es lo que le hace falta a mi sister.
Besos a todas. Y muchas gracias por estar ahí.
Cuánto lo siento... la vida es así de (con perdón) puta muchas veces, y te da golpes duros sin avisar, y seguidos. No se puede hacer nada, claro, pero...
ResponderEliminarBueno, la cocina siempre me ha parecido una terapia estupenda para muchos malos momentos. No sólo porque cocinar relaja, son esos sabores que como dices, reconfortan cuerpo y alma, y además cuando los sabores y aromas van unidos a recuerdos la calidez, aunque nostálgica, es mayor.
Un plato riquísimo que espero tu hermana haya probado ya :) Precisamente hoy he hecho "hamburguesas" de lentejas con berenjena, y es una combinación genial.
Un abrazo y muchos ánimos
Vaya lo siento mucho, de verdad¡¡ Estas pasando por malos momentos. Bueno, espero que sientas nuestro cariño a través de la red. Un beso.
ResponderEliminarÁnimo guapa, mucho ánimo y alegría, a veces es muy duro pero la vida continúa. Muy rica tu receta, con tu pemiso, tomo nota. Besos.
ResponderEliminarque buena pinta que tiene esa ensaladita y ademas de legumbres. Bss.
ResponderEliminarLo siento, Ajonjolí!!!
ResponderEliminarLa vida no avisa!!!
Qué receta más original, mas saludable y mas rica!!!
Un beso enorme!!
IDania
Lo siento mucho, este es el lado duro de la vida...un beso muy fuerte
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