Este fin de semana me está tocando currar. Tres días seguidos en el Observatorio, trabajando por las noches, sin ver a D, se puede hacer un poco largo. A cambio, lo bueno de estas campañas es que durante el día tienes tiempo de pasear, leer, o actualizar el blog :)
Así que aprovecho para compartir con todos la auténtica, única, incomparable receta de cannoli sicilianos de Giuseppe. Creo que a estas alturas ya todos conoceis a nuestro querido Giuseppe, nuestro chef italiano de cabecera, el hombre que prepara la mejor pasta fresca de Tenerife. Hace unos meses decidió empezar a servir en su restaurante especialidades del sur de Italia, de donde es él. Empezo con las arancini, rellenas de gambas y mozzarella, o de guisantes y ragú de ternera, riquísimas. Y ahora sirve de postre cannoli. Me gustaron tanto que le pedí la receta porque quería preparárselos a mi hermana P. por su cumpleaños.
Los cannoli son una especialidad tradicional siciliana que consiste en unos canutillos de masa frita rellenos con una mezcla de queso fresco, azúcar y frutas confitadas. Son relativamente sencillos de hacer, únicamente hacen falta unos cilindros metálicos donde poner la masa para que mantenga la forma mientras se fríe. El relleno de ricotta y frutas es el tradicional, aunque creo que hoy en día en las pastelerías sicilianas encuentras todo tipo de rellenos, de crema, de chocolate... Giuseppe utiliza para el relleno requesón de cabra, de la cooperativa de Benijos, que es 100% local, en lugar de ricotta, para usar ingredientes de aquí, así que yo hice lo propio. Y por cierto, hablando de fusiones con la gastronomía local, otro plato que Giuseppe está haciendo de manera habitual son los gnocchi de almogrote. A mi ya sabéis que no me gusta el queso, pero los que disfrutan con él dicen que merece la pena probarlos. Aquí os dejo una foto de los susodichos.
Ingredientes (para 12 cannoli)Los cannoli son una especialidad tradicional siciliana que consiste en unos canutillos de masa frita rellenos con una mezcla de queso fresco, azúcar y frutas confitadas. Son relativamente sencillos de hacer, únicamente hacen falta unos cilindros metálicos donde poner la masa para que mantenga la forma mientras se fríe. El relleno de ricotta y frutas es el tradicional, aunque creo que hoy en día en las pastelerías sicilianas encuentras todo tipo de rellenos, de crema, de chocolate... Giuseppe utiliza para el relleno requesón de cabra, de la cooperativa de Benijos, que es 100% local, en lugar de ricotta, para usar ingredientes de aquí, así que yo hice lo propio. Y por cierto, hablando de fusiones con la gastronomía local, otro plato que Giuseppe está haciendo de manera habitual son los gnocchi de almogrote. A mi ya sabéis que no me gusta el queso, pero los que disfrutan con él dicen que merece la pena probarlos. Aquí os dejo una foto de los susodichos.
los gnocchi de almogrote de Giuseppe |
para la masa,
150 gr de harina blanca de trigo
10 gr de cacao en polvo
1 huevo
20 gr de aceite de oliva (o mantequilla)
1 cucharada sopera de marsala, o vino blanco seco
para el relleno,
500 gr de requesón o ricotta (Giuseppe usa requesón de cabra de la cooperativa de Benijos, para darle el toque local a sus cannoli, y yo hice lo propio)
270 gr de azúcar
1/2 cucharadita de esencia de vainilla (facultativo)
100 gr de frutas confitadas
Preparación
Mezclar los ingredientes de la masa hasta tener una pasta homogénea y un poco dura (no debe quedar una masa muy blanda).
Dividirla en 12 trozos (de unos 25 gr cada uno) y hacer una bolita con cada uno de ellos, y aplastarla hasta tener un disco.
Si tenéis máquina de pasta, usadla para aplanar cada disco de masa hasta tener un disco fino. Yo usé mi Imperia con los rodillos puestos en el 5. Si no tenéis máquina, aplastad los discos con ayuda de un rodillo hasta tener un disco fino, de unos mm de espesor.
Calentar abundante aceite en una sartén, a fuego vivo. Enrollar los discos de masa en los rodillos, sin apretar demasiado, y sellando el borde con huevo batido.
Freír por tandas, depositar en papel absorbente y cuando se haya enfriado lo suficiente para no quemarnos sacar el cilindro metálico con cuidado de no romper el canutillo.
Mientras se enfrían los canutillos preparamos el relleno. Colamos la ricotta o requesón para quitarle el exceso de suero. A continuación lo batimos con el azúcar y la esencia de vainilla. Picamos muy bien las frutas confitadas y las añadimos a la mezcla. Ponemos el relleno en una manga pastelera y cuando los canutillos estén fríos los rellenamos. En realidad, si no vais a consumir todos los cannoli de una vez es mejor ir rellenándolos a medida que los vayáis a comer, para que los canutillos no se ablanden.
Y ya si podéis disfrutarlos con una copita de crema de limoncello, os aseguro que os quitarán cualquier pena.
q buena comida italiana! y el remate del limoncello me encanto!
ResponderEliminaruna comida perfecta....
ResponderEliminarbesos
Ese postre también se hace en Galicia, se llaman cañitas, y sí, están riquísimas!!
ResponderEliminarMe encantan! son parecidos a los que hacía mi abuela con crema, el sistema es el mismo y estaban buenísimos.
ResponderEliminar"Leave the gun, bring the cannoli", nunca me olvidaré de esa frase de El Padrino :)
ResponderEliminarDesde que la vi la primera vez ansío probar esa delicia italiana, pero no he tenido la oportunidad. Ahora que has compartido con nosotros la fantástica receta de Giuseppe tendré que hacerlos por mi misma, tienen una pinta de escándalo! Y me gusta la idea de rellenarlos con requesón de cabra :)
Un abrazo
Tengo los canutillos d emetal que los compre hace tiempo y no los uso mucho, te copio la receta a ver qu etal me salen
ResponderEliminarJo maja, te han quedado perfectos, porque lo de hacer los canutillos no debe ser fácil, me da en la nariz... ;-)
ResponderEliminarMe encantan este tipo de dulces. Con el relleno de requesón tiene que estar espectacular.
ResponderEliminarUn abrazo
Me recuerdan a unas cañas, que les llamaba mi madre , y las rellenaba de crema, eran una delicia, me llevo la receta al completo que con la crema de queso me parece que son ideales.
ResponderEliminarUn beso amiga.
Ajonjolí, veo que te cunde el tiempo cuando haces guardias, bandidaaaaaa... jejejejeje
ResponderEliminarOye, qué cosa más rica esos cannoli. En cuanto pase por Tenerife me llevas ipso facto a ver al tal Giuseppe. Con lo que me gusta la cocina italiana bien hecha. Y yo adoro el queso, así que imagina cómo me chifla el almogrote. Me parecen super originales esos gnocci.
Un besote y feliz martes
DESDE LUEGO NO SE PUEDE DECIR QUE NO SEAN ORIGINALES, EN UNA PRIMERA IMPRESIÓN, RECUERDAN A LAS CAÑAS Y LUEGO A MEDIDA QUE VAS LEYENDO , TE SORPRENDES DE LO ORIGINAL DE LA RECETA.
ResponderEliminarBESOS
Supongo que estos no son nada fáciles de hacer. Nunca los probé y la verdad es que se ven muy tentadores. Me gusta la opción de la masa de chocolate. Y los ñoquis mmm se ven riquísimos!
ResponderEliminarCariños
me quedo de seguidora tuya, de las que te van a marear un buen rato, no pienso perderme nada de lo que pongas.
ResponderEliminarbesos
Qué tal.
ResponderEliminarQuería informarte que hoy en el blog "Negra con puntillo" se habla de "Cannoli" y he utilizado tu receta para ilustrar a la parroquia negrocriminal que se acerca hasta mi blog.
Enhorabuena por el blog y muchas gracias por compartir tus conocimientos.
Ah, y si quieres ver cómo ha quedado la entrada, esta es la dirección:
https://negraconpuntillo.wordpress.com/2012/01/23/cannoli/